Yuri, su mejor amiga, llega a la oficina en un ataque de ira después de haber sido consultada sobre su marido, que tiene malos hábitos mujeriegos y la ha estado engañando desde siempre. Yuri no soporta a su marido, quien en lugar de arrepentirse, le echa la culpa y dice cosas como: Yo no hice nada. Se me acercaron activamente. ¡Déjame ver!, gritó, pero... Salta fuera de los pantalones que te quitaste