Aunque está ocupado con el trabajo, se encuentra en medio de la felicidad mientras se prepara para casarse con su bella novia. Una jefa inteligente a la que sus subordinados temen. Has estado mirando mis pechos, ¿no? Con una sonrisa cruel en sus labios, arrincona a su subordinado. Aunque tenía miedo, sus subordinados quedaron cautivados por su voluptuoso cuerpo. Debido a las travesuras de la jefa, la relación entre ambos se entrelaza como una cadena inquebrantable.