Mientras caminaba por la calle, sintiéndome desesperada respecto a mi vida porque era virgen y había perdido mi trabajo, vi un cartel que decía Se busca hombre. Veo esto mucho, así que no le presté atención, pensando que era algún tipo de estafa, pero de todos modos no tenía nada que perder, así que decidí llamar. Cuando fui al lugar designado, encontré allí una mansión escandalosa. Y había alguien con un estilo sobresaliente y ojos un poco solitarios.