Han pasado algunos meses desde que comencé a vivir con mi suegro debido al cambio de trabajo de mi esposo. No me agrada. Me acosa sexualmente todos los días... Quiero salir de esta casa lo antes posible. ... La corazonada de Mai se hizo realidad. Fue poco después de eso. Mai, cuya debilidad era culpa de su suegro, no tuvo más remedio que aceptar la polla de su odiado suegro en su tarro de miel durante el día cuando su marido estaba ausente. A partir de ese día su cuerpo perteneció a su suegro.